Desabasto de gas natural. Con olor a indiferencia
Dulce María Sauri Riancho Casi ha terminado la temporada electoral y su enorme atractivo. Ahora regresamos a los problemas de la vida diaria, de las familias y empresas yucatecas. Entre éstos destaca la cuestión del abasto de gas natural. No es cosa menor, pues además de las grandes distancias entre Yucatán y los grandes mercados, uno de los factores que han frenado la industrialización de nuestro Estado ha sido la carencia de energía suficiente y barata, pues la electricidad les cuesta a las empresas yucatecas más que a las del centro y norte del país. La termoeléctrica que operó muchos años a espaldas del Cuartel de Dragones, se alimentaba con combustóleo y diésel que transportaba el ferrocarril desde las plantas de Pemex localizadas en el sur de Veracruz. Lo mismo ocurrió con la planta que la relevó, la Mérida I, localizada en Chuminópolis y que continúa operando. Además de su pobre eficiencia, el combustóleo implica un alto índice de contaminación pero, de acuerdo con los criter...