En la economía global: El Dragon Mart, ¿una oportunidad?
En la década de 1980 Japón y las empresas niponas se habían adueñado de la economía del mundo. Resurgida de las cenizas de la segunda guerra mundial, la sociedad japonesa dio ejemplo de trabajo y disciplina para superar las adversidades de la destrucción y el aislamiento. En tanto, en esa misma región asiática, otra nación, China, parecía mantenerse al margen de los grandes cambios que experimentaba la organización económica mundial. Encerrada entonces en su enorme territorio habitado por la quinta parte de la población del orbe, acicateada tal vez por la prosperidad de sus vecinos, los japoneses, el régimen socialista chino dio inicio a la transformación de su organización económica. Treinta años después, la economía japonesa no ha logrado recuperar la dinámica que la caracterizó en el siglo pasado. Su lugar en la región y en el mundo ha sido ocupado por China que, después de la apertura gradual de la década de 1990, ingresó a la Organización Mundial de Comercio en 2001, hasta ubica